sábado, 12 de mayo de 2012

MITO DE ENDIMIÓN Y SELENE



Ubaldo Gandolfi (1728 - 1781) 

Selene and Endymion, circa 1770

Painting, Oil on canvas, 

Framed: 89 1/2 x 57 1/2 x 4 1/4 in. (227.33 x 146.05 x 10.8 cm)
Gift of The Ahmanson Foundation (M.2004.234)
European Painting and Sculpture Department.



La Luna siempre ha sido objeto de admiración. En la mitología griega, Selene era la diosa de la Luna, era hermana de Helios, el Sol y hermana de Eos, la Aurora. Endimión en tanto, tenía un origen divino, era nieto de Zeus y ahora, en esta historia, era un pastor en Caria. El romance entre los dos fue profundo, de una sutileza mayúscula y de una belleza sin precedentes. Endimión había ocupado el trono de Elida, pero luego que lo destronaron, buscó refugio en el monte Larmos y se dedicó al campo y a los astros, enamorándose de la luna, su única compañía en la soledad en que vivía.
Durante las noches, después de sus tareas diarias en el campo, Endimión buscaba refugio en una cueva que le servía de morada, pero si el tiempo era bueno, se dormía desnudo en la puerta al aire libre, a la intemperie. Endimión contemplaba a Selene y su corazón se nutría de un amor silencioso, hasta caer dormido. Selene por su parte, no sabía del gran amor que le inspiraba al pastor, pero una noche que bajó a la tierra, lo vio dormido, desnudo y lo amó con intensidad, sin despertarlo. Así, dormido él y ella despierta, se amaron por mucho tiempo.
La diosa ignoraba la fascinación del pastor hacia ella y él tampoco sabía que durante sus sueños, él era el objeto del amor de la diosa. Hasta que una noche Endimión se despertó durante el acto amoroso y se enteró de que era el amante de la diosa. Ambos se confesaron su amor recíproco, su más íntimo secreto y la felicidad  los embargó profundamente.
Pero entonces entró un temor en él, ya que había pasado el tiempo y su cuerpo comenzaba a marchitarse. Le pidió a Selene que en virtud de su poder divino, le concediera la juventud eterna, para poder amarla siempre de esa manera.
Ella recurrió a Zeus y este decidió que Endimión no sufriría el paso del tiempo mientras estuviese dormido y solo envejecería durante la vigilia.
Endimión le hizo prometer a Selene que lo acompañaría siempre mientras durmiera. De ese modo durante sus sueños él no envejecería y despertaría siempre feliz, aún cuando ella no estuviera para cuando eso sucediera.
No se cuenta ningún final para esta historia y se presume que ellos continúan amándose en algún rincón remoto del universo.

Adaptación del texto del “Mito de Endimión y Selene”

Del autor de la nota

-          Se deduce del contenido oculto de este mito, que el amor siempre nos renueva, nos rejuvenece y se mueve en un nivel muy distinto al pragmatismo de la vigilia ordinaria. Aún cuando el cuerpo envejece, el espíritu puede ser eternamente joven.

-          Otro punto importante es que Endimión, en tanto pastor, no es consciente de que ama,  mientras que Selene en tanto Diosa, si lo es. Pienso que el significado más profundo de esta parte del mito es que el amante, sea masculino o femenino, para este efecto da lo mismo, crece en la dirección del amor que profesa, en tanto que el amor en si mismo, o sea, lo amado en tanto diosa, es objetivamente de un nivel distinto e inalcanzable desde un nivel humano. Por lo mismo, este lo experimentará en su nivel correspondiente, en un nivel de sueño, desde donde podrá ser merced a su influjo, cada vez mejor y más feliz. El amor en si mismo no tiene la misma lógica que el devenir del mundo material, por lo que el mito lo muestra como una realidad de un nivel distinto al de la vigilia ordinaria.

-          Otro punto importantísimo es el momento en que Endimión siente que además de amante siempre vigoroso, su cuerpo envejece inexorablemente, lo cual origina en él un temor, que solo se calma cuando entiende la pureza del sentimiento, el nivel distinto en que su ser lo experimenta. Se conforma con que la diosa lo ame ad-eternum. De esa manera él será siempre joven y vigoroso, aún cuando su cuerpo tenga ese destino senil.

-          El que la historia no tenga un final nos da cuenta del sentido último de la “experiencia presencial”, como único sentido del amor. No tiene sentido hablar de él, sino que solo vale el experimentarlo. No es importante para Endimión si en un futuro no cuenta con su cuerpo joven y vital, solo le hizo prometer a Selene que lo acompañaría siempre mientras durmiera.

-          Una historia más de la mitología griega, que nos transmite el conocimiento verdadero, a través de significados ocultos que dan cuenta de la belleza de la realidad interior.

RafaTorres